Jueves 11:00 pm, noche de antro.
Con excelentes expectativas, salí de casa a las 10:00 pm.
El metro vacío a esas horas.
11:00 pm, cadenero en la puerta del antro, entrar y subir los dos pisos. Pararme junto a la ventana, cerca de la pantalla de videos... Esperar...
2:15 am, salir después de intercambiar números. Tres nuevos personajes en mi vida y pláticas casuales con otros tres. La cosa promete, fueron excelentes charlas.
2:30 am, llegar a la parada del metrobús y esperar junto con los otros. Disfrutar de esos 20 minutos viendo pasar a los autos, taxis y patrullas sobre insurgentes mientras llega el camión.
3:16 am, bajar del metrobús en san ángel y caminar al paradero a esperar la combi-taxi-colectivo que me llevará a casa.
3:45 am, platicar con los dos chicos que esperan, desupés de salir de su trabajo, en compañía de sus respectivas chelas, a que den las 5:00 am para tomar la combi en horario regular. Enterarme de que la señora de los tacos de guisado y carnitas llega a las 3:50 am a poner su puesto... ¡Y que la gente (trabajadores o gente que sale de los antros cercanos) la está esperando! Reír a gusto, como con cuates de antaño. (Ahora quiero ir al bar del Cluny).
4:00 am, tomar un taxi-colectivo (la combi-taxi-colectivo jamás llegó) y llegar a casa desupés de 20 minutos de recorrido.
La noche tiene algo especial, algo que hermana. Lazos nuevos con 5 personas en 5 horas... estoy verdaderamente satisfecha. Me gusta pensar que, a pesar de lo que se oye día con día, podemos confiar...
Definitivamente fue una hermosa noche.
3 comentarios:
wooha me imagino que siiii, que bien, que bien señorita, asi me gusta, vida social, mucha, sobre todo en ese tipo de antros. ;)
je... a mí tambiéeeen... <=D
cuentame mas no?
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